Me declaro muy fan de los libros de Marc Levy, son breves, se leen muy bien y son historias sentimentales con final feliz. Para ver desgracias ya tenemos las noticias ¿no?
Además, siempre encuentras en sus libros algún discurso filosófico-reflexivo interesante.
"Entonces el niño se echó a llorar. Lili enjugó las lágrimas de su hijo con el reverso del dedo índice.
-A veces somos impotentes ante nuestros deseos, ante nuestas
inclinaciones o nuestros impulsos, y eso produce un tormento con
frecuencia insoportable. Ese sentimiento te acompañará toda la vida;
unas veces lo olvidarás y otras será como una obsesión. Una parte del
arte de vivir depende de la capacidad de
cada uno para combatir su propia impotencia. Es difícil, porque la
impotencia engendra a menudo miedo, y éste aniquila la capacidad de
reaccionar, la inteligencia y el sentido común, abriéndole la puerta a
la debilidad. Experimentarás muchos miedos. Lucha contra ello, pero no
los sustituyas por vacilaciones demasiado largas. ¡Piensa, decide y
actúa! No tengas dudas; la incapacidad para asumir las elecciones
propias genera cierta dificultad para vivir. Cada pregunta puede
convertirse en un juego, cada decisión que tomes te podrá enseñar a
conocerte, a comprenderte.
¡Haz que se mueva el mundo, tu mundo! Mra
este paisaje que se ofrece a tu vista, admira con qué delicadeza está
cincelada la costa, parece encaje, el sol hace vibraren ella miles de
luces, todas ellas diferentes. Cada árbol se balancea a su
velocidad,movido por las caricias del viento. ¿tú crees que la
naturaleza tuvo miedo a la hora de inventar tantos detalles, tanta
densidad? Pero lo más hermoso que nos ha dado la tierra, lo que nos
convierte en seres humanos es la dicha de compartir. Quien no sabe
compartir carece de emociones. Mira Arthur, esta mañana que estamos
pasando juntos se grabará en tu memoria. Más adelante, cuando yo ya no
esté aqui,pensarás en ella y te producirá bienestar porque hemos
compartido ese instante. Si yo cayera al agua, tú no te arrojarías para
salvarme, sería una tontería.
Lo que harías es tenderme la mano para
ayudarme a subir de nuevo a bordo, y si no lo consiguieras y yo me
ahogara, tú tendrías la conciencia tranquila. Habrías tomado la buena
decisión de no exponerte a morir inútilmente pero lo habrías intentado
todo para salvarme."
Ojalá fuera cierto. Marc Levy
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